Historias de Éxito

Herminio Blanco (LEC'71) sabe lo que la palabra "visión" aplicada a la economía de un país puede hacer por el futuro de su sociedad. Proveniente de un entorno humilde, Herminio pudo estudiar en excelentes escuelas gracias al esfuerzo de sus padres en un México (años 60) donde la idea del comercio internacional se reducía a socios minoritarios fuera de las fronteras.

Economista de cepa (tiene maestría y doctorado en la materia por la Universidad de Chicago), el egresado del Campus Monterrey se desempeñó en cargos vinculados con su área desde el sexenio de Miguel de la Madrid (1982-1988). En los acuerdos para el TLCAN, que sería firmado en 1994, fue nombrado principal negociador por la parte mexicana. Su actitud al frente del tratado estuvo posicionada precisamente en su visión: lograr que la economía del país se volviera más abierta y competitiva. La propuesta visionaria de Herminio no se detuvo, como suele ocurrir, con el cambio de sexenio: entre 1994 y 2000, ya con Ernesto Zedillo en la presidencia, Emilio fue Secretario de Comercio y Fomento Industrial.

Tampoco su reconocimiento entiende de fronteras ni instituciones: trabajó en la negociación del tratado comercial entre El Salvador y Estados Unidos; obtuvo un doctorado honoris causa por la Universidad de Rikkyo, en Japón; recibió la Orden del Sol, del Gobierno peruano; en 2013, estuvo entre los candidatos a dirigir la Organización Mundial de Comercio (OMC); y en 2020 recibió el Premio EXATEC a la Trayectoria. Para el también catedrático y ponente, aquella visión sobre un México con una economía más dinámica fue gasolina para su propio desarrollo profesional:

"Si algunos no recuerdan cómo era México antes, del norte de México hacia el este y al oeste, ha sido una revolución de lo que había antes [...]. las generaciones más jóvenes no se dan cuenta del gran cambio que ha sido abrir la economía".

Xavier Aguirre (IIS'07) creció en un país acostumbrado al comercio presencial. En México, antes de la pandemia del COVID-19, la modalidad electrónica del intercambio de bienes y servicios se encontraba estancada y, aunque se avizoraban crecimientos futuros, también se preveía que la desconfianza respecto a esta forma de adquirir mercancías continuaría un tiempo.

El egresado de Campus Santa Fe llegó a eBay, en concreto a la gerencia de desarrollo de negocio para América Latina, pasando sobre esta misma tendencia, propia no solo de su país sino de toda la región latinoamericana. Su trabajo en la compañía líder de comercio electrónico impulsó que pequeños y medianos empresarios se sumaran a la plataforma como proveedores para potenciar sus ventas. Es precisamente este tamaño de negocios el que más alejado se encontraba de brincar a la digitalización antes de la pandemia.

La labor de Xavier ha sido sobre todo la del educador comprometido: Mi Negocio 24/7, la iniciativa que implantó y encabezó al interior de eBay, funciona como una especie de incubadora digital que lleva a los pequeños empresarios a fundar sus tiendas electrónicas utilizando la estructura y el soporte de eBay. Xavier destinó para ello cinco millones de pesos en un proyecto que pretendió hacer digitales a cien empresas antes solo presenciales y poner sus productos a la venta en 190 países.

La visión de Xavier es aprovechar la encrucijada abierta por la emergencia sanitaria (desde abril de 2021, trabaja en Signifyd, empresa que provee herramientas contra el fraude digital): en un mundo que por supervivencia ha desestimado el contacto entre personas, el e-commerce es la respuesta para la satisfacción de sus necesidades comerciales incluso traspasando fronteras:

“La gente que realiza comercio transfronterizo a través de e-commerce tiene más o menos en promedio un 55 % más de ventas que si lo hace solamente domésticamente y tiene 8.5 % menos de probabilidad de quebrar cuando no dependes de un solo mercado”

¿Qué se necesita para inventar el hilo negro en la época de las industrias 4.0? Arturo Martínez (LEM'07) tal vez respondería esta pregunta con la fórmula que han aplicado las empresas en que ha trabajado, como Uber y TikTok: convertir nuestra vida diaria a datos y bites.

Egresado del Campus Ciudad de México, Arturo ha acumulado experiencia en el ramo. La suya es la historia de un drástico cambio de giro comercial por convicción: tras diez años laborando para Diageo, la distribuidora en México del whisky Johnnie Walker, Arturo se movió a Uber, la empresa electrónica de servicios de transporte de personas y mercancías, y luego a Music.ly, una aplicación para crear y compartir videos personales cortos que terminaría convirtiéndose en TikTok. El EXATEC era usuario de la aplicación, y le gustó tanto que escribió a la marca, con sede en China, y pidió una entrevista. Bastaron treinta minutos compartiendo su visión de la compañía para que esta se convenciera de contratarlo.

Hasta diciembre de 2020, fungió como su director regional (ahora trabaja en Kwai, su competidora directa), posición en la que estuvo a cargo de la ampliación de la base de suscriptores y desde la cual enfrentó el boom que la aplicación tuvo con las indicaciones sanitarias de confinamiento por la pandemia del COVID-19. Arturo no puede arrepentirse del golpe al timón: las empresas disruptivas como en las que ha trabajado los últimos cuatro años están modificando nuestro consumo de todo tipo de productos y es imposible no pensar en ellas como el futuro de sus respectivas industrias cuando dicho consumo va en aumento. Para la región que dirigió, Arturo aprovechó esa misma capacidad disruptiva para sembrar el futuro con todas sus aptitudes como motor:

"Hay un común denominador en las cosas que se hacen virales: una idea que se transforma, música que se usa dentro del video y la participación de forma divertida”.

Susana Coppel (LAE'05) ha llevado la palabra "filantropía" tatuada junto a "liderazgo". No concibe una sin la otra: la posibilidad de guiar equipos, para ella, solo puede estar orientada a trabajar en bien de los integrantes de esos equipos y del resto de las comunidades que atiende la empresa en la que trabaja. Para Susana, un cliente, interno o externo, es un beneficiario.

Egresada de Campus Monterrey, sumó la competitividad y el emprendimiento, propios de la formación en el Tec, a su propia visión sobre el trabajo en función del bienestar de los demás y de la sociedad como un ente en el que se puede incidir con esfuerzo y una visión orientada a la mejora de las condiciones de vida.

A su regreso a México tras vivir una experiencia internacional después de la carrera, se integró a la empresa de su familia, cuyo nombre lleva su apellido paterno, concretamente a su área de filantropía, Coppel Comunidad y Fundación Coppel, que hoy preside. Desde la labor filantrópica que encabeza, ha podido experimentar y fortalecer su idea del liderazgo como una oportunidad de servicio.

Esta postura implica también un tercer concepto: "responsabilidad". Susana ha comprendido y difunde la idea de que todos en sociedad somos responsables de todos. La empresa de su familia ha crecido a partir de esa misma visión del cliente no como alguien que paga por un servicio o bien recibido, sino como una persona en quien la empresa incide. En esta convicción, Susana ha resultado fundamental:

“Tocamos a una tercera parte de la población o más, porque cada uno de esos créditos beneficia a una familia [completa]. Es una responsabilidad muy grande. A mí principalmente, una de las cosas que me mueven es el sentido de responsabilidad [hacia] esa gente que trabaja con nosotros y esa gente que [por el crédito que le damos] tiene su primera lavadora o licuadora”.

Bianca Monroy (LIN'01) sabe que el amor, la pasión, la fortaleza y otras muchas emociones que nos identifican como humanos tienen una vía de expresión inigualable en el color, la forma, el cuidado estético y los elementos que dan lugar a una obra de arte visual.

Egresada del Campus Querétaro, trabajó en labores de logística durante más de una década y, en 2012, dejó todo por el arte. Con la experiencia en pequeña escala que había reunido durante su vida, recientemente ha basado su trabajo pictórico en la explotación de los elementos que hacen "bella" a una obra de arte para representar sus sentimientos e inspirar en el espectador emociones y memorias. Se trata, sobre todo, de ahondar en las pasiones humanas, las dudas y necesidades que nos caracterizan como especie.

En 2016, por ejemplo, en el Parque Tecnológico del Campus Querétaro, la "explosión de colores" de Bianca trazó la composición "México de mis amores", un cuadro que proyecta su pasión por las formas y el colorido propios de la cultura mexicana.

Con casi diez años de ejercerlo de manera profesional, el arte se ha transformado para Bianca en un modo de explorar la vida, de comunicar y poner en contacto con otros su mundo interior. Ha tenido éxito en este esfuerzo de expresión: su trabajo ha sido expuesto en ciudades como Milán y Berlín, participó en la fundación del Club EXATEC en el Arte y es promotora de su propia incubadora de talento artístico, Brunereau & Monroy, que promociona creadores nacionales en el extranjero.

"Creo que esta frase [...] en mi caso es muy cierta: 1% talento, 99% dedicación. Trabajo duro, esfuerzos, responsabilidad, compromiso con lo que hago. [...] saber que como mexicana voy representando a México en cada uno de los espacios en los que me dseenvuelvo. Eso ha hecho que mi arte se haya consolidado con su estilo único, [...] y que cada oportunidad lleve a otra oportunidad".

Jorge Font (LAE'93) tiene claro lo que significa la palabra "reconstrucción". Había practicado el esquí acuático desde los 7 años, y obtenido premios en dicha disciplina durante toda la década de los ochenta, hasta que un accidente a los 19, terminando el bachillerato, causó severos daños en su cuello y una parálisis en su tren inferior.

Vivir su recuperación entendiendo que podría haber perdido su independencia para el resto de su vida significó para Jorge miedo y dolor, lo que él mismo distingue como los ingredientes de una "pesadilla". Egresado de Campus Cuernavaca, Jorge tuvo que sobreponerse a ese miedo para sobrevivir. Cuando fue dado de alta, ocho días después de su accidente y tras varias operaciones, el suceso había marcado para él un destino ligado a su silla de ruedas y el tener que volver a aprender actividades básicas como vestirse o escribir.

Cuando ingresó al Tec, había perdido toda esperanza de tener una vida normal y destacar en algún ámbito. La Institución le dio confianza y motivos para seguirlo intentando. Primero como oyente y luego como alumno, Jorge encontró en la comunidad del Tec una red de apoyo solidario que lo acompañaría durante su carrera e incluso después, en su papel de conferencista y Director de Filosofía Institucional de la Fundación Teletón, actividades con las que acompaña a otros.

Desde entonces y hasta la fecha, Jorge no ha dejado de reconstruirse: sigue manteniendo sesiones diarias de seis horas de ejercicios de rehabilitación y, sorprendentemente, volvió a practicar el esquí acuático. Como parte de su propio sistema de supervivencia, ha logrado ver en su discapacidad un motivo de seguir y de ayudar a los demás a levantarse de sus propias caídas.

"¿Qué me digo cuando me equivoco? Yo no creo que ninguna persona, con o sin discapacidad, pueda decir que ya la hizo en la vida. La vida para mí se construye todos los días".

Fernando Platas (LAE'92) es mucho más que un medallista olímpico. Si bien su rostro, sonriente e inspirado, ganó fama sobre el podio de Sídney, en el 2000, cuando obtuvo la de plata por su desempeño en el trampolín de tres metros, su figura ha estado ligada a la definición del deporte mexicano de alto rendimiento y del liderazgo.

Egresado de Campus Estado de México, durante su paso por el Tec vio siempre a los clavados como una pasión en torno a la cual se obligaba a organizar el resto de su horario. Esa misma pasión lo llevó a cuatro justas olímpicas (Barcelona, Atlanta y Atenas, además de Sídney), a tres Juegos Centroamericanos y del Caribe, en los que ganaría cuatro veces el oro, y a todas las justas posibles de su disciplina: Panamericanos, Nacionales, Copas Mundiales, Universitarios y, ya mencionados, Centroamericanos y Olímpicos. La pasión de Fernando rindió frutos durante todo su periodo de actividad: es Premio Nacional del Deporte 1993 y no hay una sola competencia internacional de la que no posea una medalla.

Además, lo ha llevado a seguir un camino en favor del impacto social a través del deporte y la salud cuando su actividad en las plataformas ha terminado: preside la fundación Movimiento Salud, que combate el sobrepeso y la obesidad entre niños y jóvenes mediante la difusión y sensibilización sobre buenos hábitos de deporte y alimentación. Busca con ello que puedan tomar consciencia, responsabilizarse sobre su vida y los hábitos necesarios para prolongarla en bienestar.

Al final, su amor por el deporte le permite comprender el resto de los temas, y no ha descartado el emprendimiento deportivo como un siguiente paso profesional:

"El tema aspiracional que tiene el deporte no se ha explotado. Muchos de los valores se pueden ejemplificar con el deporte. Una de las partes más humanas del deporte, por ejemplo, es que se comenten errores”.

Adriana Citlali Ramírez (IFI'01) es una profesionista de alto nivel con doble motivación: por un lado, ha desarrollado la geofísica de exploración en industrias de hidrocarburos, y por otro, aprovecha los escenarios de sus reconocimientos para denunciar el acoso sexual que sufren las mujeres en su medio profesional y laboral y en otros entornos.

Egresada de Campus Monterrey, nacida en Ciudad de México y doctorada por la Universidad de Houston, Adriana conoce muy bien el arduo camino que una mujer debe recorrer para destacar en entornos tradicionalmente dominados por los hombres, como las ciencias exactas. Esa sensibilidad sobre la presencia femenina en el mundo profesional la acompaña desde la carrera. Creó la campaña "STOP before I say NO" en Facebook contra el acoso sexual.

Su motivación científica la ha puesto en espacios igual de estimulantes. Como geofísica de exploración, ha trabajado en Reino Unido, Noruega y Estados Unidos para compañías como Schlumberger WesternGeco, Statoil y TGS. Es jefa geofísica para Europa y Rusia, la mayor posición técnica de la industria. Es la única mujer latinoamericana que ha ocupado dicho puesto, lo que representa sus dos motivaciones: el avance de las mujeres en las ciencias exactas y su pasión por la ciencia aplicada.

Ha desarrollado al menos cuatro patentes en su área, y es Presidenta del Capitulo Europeo del Comité Consultivo Regional de la Sociedad de Geofísicos de Exploración y parte del comité de mujeres de ese organismo. Obtuvo el Premio a la Trayectoria EXATEC 2020. Ve en la geofísica una vía para comprender el mundo, y el activismo como una herramienta para mejorarlo:

“Es una industria fascinante porque [...] tú puedes escribir tus ecuaciones y tu teoría, aplicarla de inmediato y saber si realmente funciona. [...]. Decidí cambiar de actitud y en vez de ser víctima ser una activista [...] la única manera de no ser la víctima es luchar en contra [...] y volverte activista”.