La venta de manzanas que ha cambiado la vida de más de 300 perritos

Fotos: Ingrid Dominique Trejo

"No me acuerdo muy bien cómo, solo que le dije a mi mamá: 'Hay un refugio (de perros) cerca de la casa, quiero ir a conocerlo'". 

Fue así como a sus 10 años Ingrid Dominique Trejo inició su amor por las mascotas, que la llevó a crear ‘Dogminique’, un proyecto que ha ayudado a más de 300 perros, y ahora como estudiante del Tec de Monterrey campus Ciudad de México lo hace con la venta de manzanas con chile.

El proyecto nace al tener ella su primer acercamiento con el refugio Oceanican, pero que por situaciones escolares se tuvo que alejar.

Fue hasta que comenzó su carrera profesional como estudiante en Ingeniería en Desarrollo Sustentable en el Tec, en donde inspirada por un amigo, decidió regresar a su pasión, la de apoyar con fondos a perros sin hogar a través del refugio. 

Y lo realizó con la venta de manzanas.

“Reactivé la parte del refugio y volvimos a ir. Nos dimos cuenta de que les hacía falta mucha ayuda y muchas cosas. Me di a la tarea de buscar o idear algo que pudiera yo vender y que ayudara a los perritos.

“Empecé vendiendo manzanas con chile en primer semestre. Creo que mi máximo ha sido vender 40 manzanas al día”, dijo.

Dominique no se limitó a solo recaudar fondos, sino que comenzó a hacer labor de rescate por su propia cuenta.

“Por mi parte hago rescates, desde que conocí el refugio hasta la fecha he hecho rescates independientes. Yo creo que he rescatado y dado en adopción unos 15 o 20 perros”

Creciendo a partir de la comunidad Tec

La comunidad Tec ha sido parte de este proyecto e Ingrid considera que debe ser reconocido, es por eso que abrió las cuentas de Instagram y Facebook de @dogminiquee donde constantemente está en contacto con las personas para tratar cualquier tema relacionado con los perritos. 

“Todo mundo piensa que la comunidad del Tec es medio apática, pero yo he vivido que no es así, me han dado bastante apoyo y eso se debe dar a conocer.

“Entonces cree la página y precisamente esta página surge para hacer colectas por mi parte y ahí se hacen todas las menciones y los rescates independientes”, comentó.

Ingrid comenta que es dentro de este espacio donde han encontrado oportunidades a futuro para seguir desarrollando este proyecto. 

“Con el Tec yo tengo ya con varios grupos estudiantiles acordado que quieren ayudar al refugio. Mi director me comentó que quiere meter Oceanican y Dogminique como servicio social.

“No puedes cambiar el mundo, pero puedes cambiarle el mundo a ese perrito”, finalizó la estudiante del tercer semestre.

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