Para coadyuvar en la producción de fertilizante orgánico, profesores del Tecnológico de Monterrey en Morelia, desarrollaron la instrumentación y el control de un biorreactor para la producción de fertilizante.
Los profesores consideran que el desarrollo tecnológico que realizaron se apegó a la esencia de la innovación frugal, pues las soluciones frugales no son sofisticadas o perfectas, sino que crean más valor con menos, a fin de impactar en las formas de producción de cultivos, haciendo más eficiente la producción de fertilizante.
Es un proyecto de investigación e innovación que se realiza en colaboración del Tecnológico de Monterrey y la empresa Organic Science (CEO: Pavlína Fabián Plesníková). El logro de estos Morelianos es que están generando tecnología a un costo muy inferior con respecto a los sistemas comerciales.
Este proyecto se desarrolló a través del Programa de Estímulos a la Innovación Conacyt, que busca que las empresas desarrollen nuevas técnicas y las apliquen a sus procesos.
A este proyecto se sumó el ingeniero Humberto Estrada Mendoza, así como alumnos de Ingeniería Mecatrónica, entre los que destacan Pedro Emiliano Rusiles Da Cunha Lopes y Nestor Alejandro Narcizo Nuci, además de otros estudiantes de las materias de Control computarizado, Laboratorio de control automático, Diseño Mecatrónico y Laboratorio de Mecatrónica.
“Es muy gratificante desarrollar este tipo de proyectos, que tengan un impacto intelectual y académico, pues se pone frente a los alumnos a un problema real” afirmó el Dr. Rosalino Rodríguez.
Por otra parte, el Dr. Salvador González comentó que “Para cumplir con los resultados y entregables propuestos este proyecto se desarrolló apegado a metodologías de diseño y desarrollo de productos."
Este mes de enero los profesores asistirán al 48º Congreso de Investigación y Desarrollo del Tecnológico de Monterrey a presentar su proyecto “Innovación frugal para el diseño y desarrollo de un proceso basado en biorreactor para la producción industrial de un inoculante de plantas a base de un consorcio de microorganismos.”
Además, continuarán vinculando el proyecto con las actividades académicas de la institución para retar a los estudiantes al desarrollo de soluciones para necesidades concretas.
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